Narcoturismo, el lado oscuro del turismo.


¿Qué es el narcoturismo?
El narcoturismo o turismo de droga es una corriente turística en la que las personas visitan una zona específica, lo hacen con la intención de adquirir y consumir drogas.
Este nace gracias a las leyes restrictivas de cada país, por lo que en algunas localizaciones la policía la venta de droga en establecimientos especializados, principalmente la venta de marihuana y hachís.
En esta especie de oferta turística dirigida a los interesados en drogas y sus historias, muestran a los narcotraficantes como estereotipos de gran riqueza y los extranjeros piden recorridos inusuales a lugares donde hubo masacre, por ejemplo. También es usual la petición de fotografías de impactos de bala y hasta rastros de lucha entre cárteles.

                           

¿Características?
Las principales características y actividades del narcoturismo son:
  • Visitar laboratorios de drogas sintéticas o plantaciones de marihuana.
  • Conocer las culturas de los países donde es tan típico la venta o consumo de estas sustancias.
  • Visitar las casas de los narcotraficantes, para vivir de primera mano como es la vida de los traficantes de droga.
  • Escuchar historias sobre contrabando, métodos de ocultación de droga, tipos de consumo...

¿Causas?
Este tipo de turismo ha tenido un gran crecimiento a partir de la década de los 60. A partir de entonces una gran cantidad de la población se ha sentido atraída por los efectos de las drogas y conocer un poco mas este mundo.

¿Destinos?
Actualmente, estos son los principales lugares donde podemos hacer narcoturismo:
  • Holanda: como principal exponente debido a sus leyes liberales sobre la venta y consumo de drogas blandas como la marihuana o el hachís.
  • Estados Unidos: específicamente en California, donde la marihuana es legal para uso terapéutico y también para uso recreativo.
  • Actualmente existen otros países donde practicar narcoturismo es una costumbre cada vez mas extendida y regularizada:
  • Tailandia.
  • Colombia
  • México.
    Actualmente, en España, aunque ilegalmente se puede practicar este tipo de turismo en:
  • Ibiza: como principal sitio turístico de fiesta, sexo y droga, donde muchos turistas de todas las partes del mundo visitan, mayoritariamente, por la fiesta y la droga (siendo esta muy sencilla de conseguir).



¿Ejemplo concreto?

Un ejemplo muy interesante es el narcoturismo en Colombia, ya que principalmente se centra en la figura de Pablo Emilio Escobar Gaviria y en su patrimonio y recorrido histórico en la ciudad de Medellín.

Un ejemplo de ello es Rancho Manuela, una de las casas de Escobar, es sede para juegos de gotcha, en donde unos simulan ser el narcotraficante colombiano y otros agentes de la DEA.
Uno de los juegos que se realizan consiste en hacer el papel del capo de la droga. Encerrado en el segundo piso y sin munición, narra un ataque sorpresa por un supuesto agente de la DEA, la Agencia Antidrogas de Estados Unidos.

Todo es diversión y juegos para los viajeros que visitan Colombia en busca de una conexión real con la exitosa serie de Netflix Narcos, que narr cártel con un patrimonio neto de más de dos mil millones de dólares en 1987. Los turistas en Colombia pueden ver la tumba de Escobar y el abandonado edificio de apartamentos donde vivía su familia. También pueden pagar cientos de dólares para visitar a familiares y allegados que prometen una mirada al interior de la vida del capo. Según la agencia de investigación belga especializada en turismo TCI Research, uno de cada diez visitantes internacionales que van a Colombia lo hacen atraídos por programas o películas que hablan del país.
En las montañas de Medellín, Roberto Escobar, el hermano de Pablo, atiende a turistas que buscan una clase de emoción diferente. Organiza visitas guiadas a objetos de interés, como coches llenos de agujeros de balas, una moto acuática propiedad del capo, y la mesa donde éste tuvo su última cena, narrada al mínimo detalle hasta un vaso de vino derramado, el propio Roberto Escobar dice: “La gente quiere conocer las historias reales, y nosotros tenemos las historias.”
Otros de los rincones más frecuentados son el edificio Dallas, en la zona noble de El Poblado, la vivienda de Los Olivos en cuyo tejado cayó abatido o el Edificio Mónaco, residencia por varios años de Escobar y su familia.






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